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Inestabilidad crónica del tobillo

Actualizado: 25 jun 2019

El concepto de inestabilidad crónica del tobillo se define por la aparición de esguinces recurrentes y la prolongada persistencia de dolores residuales con una sensación subjetiva de déficit articular.

La inestabilidad crónica se desarrolla después de un trauma (como un esguince), aunque puede tener otras causas.

Esta condición de inestabilidad crónica está caracterizada por situaciones repetitivas, con la sensación de que el pie se colapsa sobre la superficie externa, y que puede ocurrir durante la marcha o incluso de pie.

El esguince de tobillo es una de las lesiones más comunes y cerca de 30% de los casos evolucionan en inestabilidad crónica. Esto muestra claramente la frecuencia que presenta este cuadro clínico.

Este problema crónico afecta a muchos atletas. Los deportes en los que se realizan saltos y recepciones en apoyo de un pie, presentan un elevado riesgo de lesión en la articulación del tobillo.


Factores de riesgo

La causa más común de inestabilidad crónica es una cicatrización incompleta de un esguince de tobillo, donde el tejido que conecta los huesos están bajo tensión o desgarradas. Si el tratamiento o la terapia física no son apropiados, los ligamentos pueden debilitarse generando la consiguiente inestabilidad.

Otras causas posibles de este cuadro son las lesiones del nervio con estiramiento o ruptura después de un golpe, la inflamación de un tendón, artritis, fractura o el desarrollo de una cicatriz después de un esguince.


Síntomas de la inestabilidad crónica

Los síntomas más comunes son dolor en el tobillo externo, dificultad al caminar, sensación de inestabilidad, hinchazón, rigidez y esguinces frecuentes.

El dolor puede ser tan intenso que puede obstaculizar la marcha.


Diagnóstico de la inestabilidad crónica

El diagnóstico después de la observación clínica, se realiza a partir de una Resonancia Magnética. La ecografía y la Tomografía Computada pueden también ser de mucha utilidad.


¿Cómo prevenirla?

Fortaleciendo, flexibilizando y equilibrando la articulación del tobillo.

En el caso de la práctica de deporte, es esencial un precalentamiento adecuado, con programas de entrenamiento específico y el uso de calzado apropiado. Este calzado debe reemplazarse cuando el desgaste en la suela se hace visible.

En el caso de la corrida, se deben evitar superficies muy irregulares.

Cuando se producen signos de fatiga, el descanso es fundamental.

Lo más importante es que si produce un esguince, de debe realizar el tratamiento precozmente y para evitar la persistencia de alteraciones que pueden evolucionar en un cuadro de inestabilidad crónica.

diagnóstico de lesiones de tobillo en imaxe

IMAXE Centro de Diagnóstico por Imágenes Área Traumatología y Deporte El mejor tratamiento es la Prevención

PET-TC / Resonancia / Tomografía / Ecografía / Intervencionismo

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